Tantos años pasando frente a aquella sencilla casa sin imaginar la sorpresa que años después me llevaría, así es la zona 1 de la ciudad guatemalteca, inesperada.
Al llegar, la fachada pasa desapercibida con pared de ladrillos que parece no esconder nada, es una casa más con una puerta blanca que, como debe ser, permanece siempre cerrada. «Toque fuerte» me indica una cuidadora de carros del peculiar callejón, aparece inmediatamente la mística del centro histórico y la amabilidad de “Polo”, un ciudadano que cae bien al instante y uno de los creadores de este íntimo y agradable concepto.
Una inmensa piscina en un exclusivo y relajado espacio amenizado con acertada música y una mesa de billar. Descubrí así Solo Caras Bistro, un restaurante y espacio cultural a puerta cerrada ubicado en un cálido callejón lleno de maravillas. Para ingresar, una reservación vía telefónica es suficiente. Las paredes están decoradas con ese toque excéntrico pero necesario para una atmósfera única, en Solo Caras hay comida y bebidas a precios razonables con la calidad suficiente para volver. Le dejo el menú, en esta primera visita llegué muy temprano y el desayuno no me decepcionó en absoluto.
La piscina está disponible para quien guste darse un chapuzón, con este frío parece cosa de locos pero la buena noticia es que los espacios de Solo Caras Bistro pueden reservarse en cualquier época del año para todo tipo de eventos. Qué sorpresa me he llevado ¡qué joyas guarda el corazón de la ciudad!
Reservaciones al 5513-8534
4 calle A 2-60 zona 1, Ciudad de Guatemala.
